¿Cómo el calor afecta a tu vehículo?
Hace unos días leímos en Centro de Formación Vallbona una noticia en el periódico gratuito 20 minutos que deberían tener en cuenta todos los conductores en vacaciones. El calor no solo te afecta a ti, también el calor afecta a tu vehículo y es un hecho que pasa desapercibido para la mayoría de propietarios de un coche. En las autoescuelas en Valencia lo sabemos bien porque nuestra ciudad es igual de calurosa y húmeda. Hablamos de ello en las clases de autoescuela en Valencia, en La Pobla de Vallbona y L’Eliana, y en los cursos para formadores, especialmente en estos meses cuando las altas temperaturas aprietan.
El calor incide principalmente en componentes del coche, como el motor, la batería, los frenos y las ruedas. Por eso un buen sistema de refrigeración y mantenimiento son esenciales.
Las altas temperaturas indicen en el funcionamiento del motor que no debe sobrepasar nunca la línea roja del indicador. En verano el motor realiza un sobreesfuerzo pero esto no debe suponer un problema siempre y cuando funcione correctamente el sistema de refrigeración. Para ello cabe comprobar que el líquido refrigerante se encuentre en el nivel óptimo y cambiarlo cuando lo indique el fabricante (aproximadamente a los 60.000 Km o menos, si el coche tiene muchos años ). Así evitaremos un sobrecalentamiento del motor que puede reportar problemas a largo plazo.
Si la presión de los neumáticos es baja se calientan más porque el asfalto desprende más calor a mayor temperatura ambiental. Esto provoca, por una parte, que sufran un mayor desgaste, y por otra; que aumente el riesgo de pinchazo o reventón. Así que hay que revisar la presión de las ruedas e hincharlas hasta el valor indicado. Lo mismo ocurre con las pastillas y los discos de freno. Al contacto desprenden calor y si hay más grados requieren más líquido de frenos. Los líquidos en general son más susceptibles a la evaporación debido a las altas temperaturas y por eso hay que controlar todos los niveles periódicamente.
La batería sufre igualmente con el calor. Algunos profesionales recomiendan desconectarla si el vehículo va a estar parado un largo periodo y bajo el sol. No hace falta llegar a este extremo, pero sí dejar aparcado el coche a la sombra y mejor si es en un lugar fresco como un garaje.
El sol también tiene consecuencias negativas en la pintura y el tapizado del coche pero existen productos especiales anti UV. El lavado resulta más caro pero a la larga compensa. Recurrir a los socorridos parasoles también ayuda y paliará la sensación asfixiante al entrar al coche después de haber estado aparcado unas horas al sol.
La temperatura del coche también afecta al conductor
Conducir con una alta temperatura en el coche también puede tener consecuencias en el conductor ya que desplazarse a 35º en el interior del coche equivale a conducir con una tasa de alcoholemia de 0,5 gramos en sangre. En este enlace podéis conocer las causas por las que un coche llega a alcanzar temperaturas tan altas y algunas alternativas para mantener una temperatura constante en el coche estando parado o refrigerarlo antes de entrar en él.
